Un jurado federal encontró culpable a Mark Barnett, de 50 años, de planificar colocar bombas en tiendas Target en toda la costa este de Estados Unidos.
Barnett fue declarado culpable de intento de incendio, posesión de un dispositivo de destrucción no registrado y fabricación de un dispositivo de destrucción no registrado.
Actualmente el acusado enfrenta hasta 30 años en una prisión federal. Los investigadores dijeron que el hombre planificaba esconder las bombas dentro de una mezcla de relleno, barras de desayuno y pasta.
El objetivo de su ataque era hacer que las acciones de Target cayeran, por lo que podría comprarlas a bajo precio y luego ganar dinero cuando estas subieran nuevamente. Un testimonio revelo que Barnett había ofrecido $100,000 para plantar bombas dentro de las tiendas Target a lo largo de la costa este de Estados Unidos.
El hombre, que es un ofensor sexual registrado, compró los componentes de la bomba y ensambló al menos 10 dispositivos, los cuales disfrazo dentro de paquetes de productos comestibles. Poco después entrego los dispositivos a su cómplice con instrucciones para ponerlos en estantes dentro de Target desde Nueva York hasta Florida.
Luego que el supuesto cómplice recibiera los dispositivos, este los entregó a las autoridades rápidamente para evitar alguna tragedia.
Barnett fue arrestado el 14 de febrero de 2017 y había sido liberado condicionalmente de la prisión estatal en 2013 luego de múltiples condenas por delitos graves de agresión sexual, secuestro y hurto mayor.
