Desde los campos de batalla de la Guerra Hispanoamericana hasta el vibrante distrito de Ybor City en Tampa, Florida, la historia de la Panadería La Segunda Central es una narración rica en tradición, tenacidad y la pasión por el auténtico pan cubano que está celebrando sus 108 años de aniversario.
La historia de la famosa fábrica de panes comenzó a finales del siglo XIX con Juan Moré, un soldado nacido en la región catalana de España. La guerra lo llevó a Cuba, donde descubrió una receta tradicional de pan cubano que lo cautivó.
Pero Moré no solo descubrió un nuevo país y una nueva oportunidad, sino también un sueño: fundar la panadería de sus sueños.
Aprovechando la próspera comunidad cubana en Ybor City, Florida, Juan Moré dio vida a su visión. Luego alrededor del inicio de la Primera Guerra Mundial, unió fuerzas con una cooperativa de panaderos y fabricantes de cigarros para abrir tres panaderías: La Primera, La Segunda y La Tercera.
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Cuando las dos primeras panaderías cerraron, Juan compró La Segunda Central Bakery a sus socios, estableciendo así una institución que perdura hasta hoy como un emblema de la época cubanoamericana y apoya la economía local, cultural y culinaria de Tampa y los inmigrantes.
La atención que Juan dedicó a sus recetas, su personal y sus clientes sigue siendo evidente más de un siglo después. Los habitantes de Ybor City continúan su tradición diaria de café con leche y tostada cubana en La Segunda Central, mientras los camiones cargados de pan cubano fresco se dirigen a restaurantes y mercados de todo el país.
El espíritu de Juan Moré se ha transmitido a través de cuatro generaciones. En 1915, Juan fundó la panadería. Sus hijos, Ricardo, Raymond y Anthony se unieron a él, dando forma al futuro de la empresa.
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Los hijos de estos, Raymond y Anthony, continuaron expandiendo la panadería con éxito. Hoy en día, Anthony Albert Moré y su hijo, Anthony Copeland Moré, continúan la tradición, produciendo diariamente 18,000 panes cubanos y manteniendo viva la visión de Juan donde todo comenzó.
En La Segunda Central, el auténtico sabor se consigue a través de las tradiciones hechas a mano. La panadería ha resistido la prueba del tiempo, preservando costumbres que se remontan a principios de 1900.
Cada pan se prepara con una hoja fresca de palma colocada sobre la masa, creando la firma de corte característica del pan cubano. Este es un arte que requiere habilidad y paciencia, desde la mezcla cuidadosa de los ingredientes hasta la colocación individual de cada pan en el horno.
El proceso da como resultado un producto de la más alta calidad: un pan cubano con una corteza crujiente por fuera y suave por dentro. El secreto radica en los pasos meticulosamente ejecutados por los maestros panaderos, muchos de los cuales han sido parte de la familia La Segunda durante más de 20 años.
La Bahía de Tampa cuenta con tres ubicaciones donde los clientes pueden ir a probar los diferentes dulces que apoyan la cultura local. Ybor City, St. Petersburg y Kennedy Blvd. son los hogares de estos restaurantes visita este portal para más información.
